Cartografía biocultural y modelización de ecosistemas

Resumen
Preservar y fortalecer las condiciones necesarias para la vida en la Tierra constituye el desafío central del conocimiento interdisciplinario y trans-epistémico en la actualidad. Dado que la mayor parte de la biodiversidad mundial habita en las regiones subtropicales —y que un asombroso 80% de la biodiversidad restante del planeta se encuentra en territorios gobernados y conservados por pueblos indígenas—, la protección de los bosques neotropicales y la revitalización de los saberes bioculturales indígenas deben abordarse de manera conjunta para mitigar la pérdida de especies. Esto exige colaboraciones innovadoras que entretejan análisis a gran escala sobre las fuerzas globales con estudios situados y estrategias de conservación biocultural.
Los enfoques bioculturales de la conservación de la biodiversidad ponen de relieve la interdependencia entre la diversidad cultural-lingüística de los pueblos indígenas y la diversidad biológica presente en sus territorios. La academia, por lo tanto, desempeña un papel fundamental en apoyar los esfuerzos de los pueblos indígenas para defender sus territorios y mitigar la degradación ecológica. Sin embargo, definir objetivos de conservación biocultural es particularmente complejo en regiones que atraviesan procesos acelerados de degradación ambiental. Nuestro equipo multidisciplinario responde a este desafío colaborando con comunidades indígenas asociadas para identificar, monitorear, modelar y evaluar criterios e indicadores de conservación definidos localmente.
Este proyecto se lleva a cabo en colaboración con el Centro para Alternativas de Conservación y Desarrollo Indígena (CICADA) y la comunidad Majé Emberá Drüa. Nuestro objetivo final es integrar prácticas de conocimiento biocultural indígena, técnicas contra-cartográficas y videográficas con teledetección, modelos de distribución de especies y modelación hidrológica, con el fin de desarrollar líneas base ecosistémicas locales que permitan a nuestra comunidad asociada, Majé Emberá Drüa, identificar y monitorear sus metas de recuperación forestal en la cuenca Bayano-Majecito, en el sureste de Panamá.
Hasta ahora, este proyecto ha generado varios resultados concretos que apoyan directamente la gobernanza territorial de la comunidad Majé Emberá Drüa:

1. Capas SIG coproducidas que documentan tanto los cambios históricos en el territorio (inundaciones, deforestación, incendios) como los planes comunitarios para futuros proyectos (reforestación, nuevas escuelas, sitios turísticos y senderos). Estas capas han sido compiladas en mapas integrales (ver figura) que funcionan como herramientas de planificación y como documentación para el proceso de reclamación territorial de la comunidad.
2. Conjunto de datos georreferenciados de especies clave bioculturales dentro del territorio, generado a partir de extensos transectos realizados por portadores de conocimientos de la comunidad. Este conjunto de datos proporciona una documentación sin precedentes de la diversidad ecológica del territorio desde una perspectiva indígena.
3. Análisis integrado de distribución de especies que combina conocimiento ecológico tradicional con modelación científica para orientar la planificación de la restauración. Este análisis ayuda a identificar las áreas de mayor prioridad para la reforestación según predicciones científicas y significados culturales.
4. Infraestructura de intercambio de conocimientos mediante sesiones de capacitación y metodologías de investigación participativa que fortalecen la transmisión intergeneracional del conocimiento y al mismo tiempo desarrollan la capacidad comunitaria para utilizar herramientas contemporáneas de cartografía y modelación.

Responsable en PRISM: Carmen Umaña-Kinitzki, Shriram Varadarajan
Colaboradores: Mauricio Mecha (líder de la comunidad emberá), Lázaro Mecha (líder de la comunidad emberá)

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